“- Perdona.
- Diablos, eres tan grotesco.
- Lo sé.
- Estás obeso, eres torpe y un chapucero. El aspecto no es lo que cuenta pero eso también tiene un límite, ¿no crees?
Eres tan glotón que pareces un vertedero andante y sin embargo, eres el genio del siglo.
- Yo me trago lo que sea, bueno y malo.”

“- No estoy gordo es que tengo mucho pelo, y por eso parezco hinchado.
- Sí claro, lo que tienes gordo es el pelo.”

“- Papá soy obesa.
- Ay no es cierto, eres una niña preciosa.
- Eso es lo que dicen todos los padres.
- ¿Papá soy un hombre precioso?
- ¡No! ¡Eres feo como mi verruga!
- ¿Ves?”

“- Esto es América, hay que pensar a lo grande para hacer cosas grandes.
- Ser grande no es un problema en esta familia, Wilbur.”

“- Torrente, si tiene usted tetas.
- Esto no son tetas, ¡Son pectorales!”