“Pasó el miércoles sin pena ni gloria, llegó el jueves y, con él, la lluvia: no mucha y tan solo a ratos, pero lo suficiente como para dejar ver a través del ventanal un día gris que invitaba a no pisar la calle.”
María Dueñas
“Cuando la tierra respondía como una caja de resonancia, con un ruido fértil y profundo, y el mundo cantaba en torno a ti, en todas las dimensiones, por encima y por debajo, ésa era la lluvia. Era como volver al mar cuando has estado mucho tiempo lejos de él, como el abrazo de un amante.”
Isak Dinesen
“Cuando se hubieron acostumbrado a la idea de la poesía, me pedían: Habla otra vez. Habla como lluvia. Por qué sentían que el verso era como la lluvia es algo que no sé. Quizá sea una expresión de aplauso, porque en África la lluvia siempre es deseada y bienvenida.”
Isak Dinesen
“La lluvia se precipitó. Las gotas eran como los dedos de un pianista tocando sobre la tierra una melodía de metal, aguda y cortante. Una melodía que ahogaba los gritos y las lamentaciones. Una melodía que aterraba los corazones de aquellos que miraban desde el cristal de las ventanas.”
Juan Camilo Betancur Echeverry